6 de Marzo de 2018

Anoche el albergue era todo para mí. Cuando llegué estaba frio y la calefacción apagada. La hostalera me ofreció 2 mantas que me vinieron muy bien.

Empecé a caminar a las 8:30 y no esperaba cruzarme con nadie en todo el camino a Arzúa. La mayoría de este tramo va por caminos de tierra y piedras rodeados de árboles. Es de los tramos que más me han gustado hasta el momento.

Crucé varios pueblecitos pintorescos y llegué a Melide. Aquí, un puente de piedra te da la bienvenida a unas calles y casas empedredas. Me pareció un lugar a tener en cuenta para hacer noche con mejor clima.

Seguí caminando. Las nubes dejaron pasar el sol y pude ver el paisaje.

Llego a un pequeño pueblo donde cruzo 3 argentinos que viven en España. El padre, Omar, y sus dos hijos, Hernán y Santiago, que hacían el Camino para pasar tiempo juntos. Conversamos un poco y sigo caminando. Al rato, en la cuesta más larga que he subido en el camino me cruzo con otra pareja que descansa. Yo quiero subir esa cuesta del tirón así que nos saludamos mientras sigo caminando.

Ahora empieza a caer un pequeño granizo. Golpea mi chubasquero, cae al suelo y se deshace. Para. Al rato vuelve el granizo pero esta vez acompañado de fuerte lluvia y aire. Me da el tiempo justo de ponerme el poncho antes de terminar cubierto de agua.

A una hora de llegar a Arzúa me paro en el albergue Santiago. Me pido un té y el dueño añade un trozo de coca. Conversamos un poco sobre los viejos tiempos y los nuevos del camino. Al final el hombre solo me quiere cobrar un euro que llevaba en monedas varias. Si pasáis por allí parar a tomar algo. Cuando me dispongo a salir aparece la pareja que me crucé con más argentinos, Laura y Gonzalo, que vienen por el Camino Primitivo. Conversamos un poco y me vienen buenos recuerdos de Argentina y su gente. Ganas de volver por allí.

Sigo caminando hasta Arzúa pensando en canciones de Kevin Johansen.

«Acuéstate y duérmete para despertar
Sonriente y feliz
Despiértate, levántate para cansarte
Y volver a dormir
El círculo da la vuelta
Y al terminar, la vuelve a dar»