19 de Abril de 2018

Los próximos días son de sol y relax. Essaouira es una ciudad al sur de Marruecos y pegada a la playa, conocida por los surfistas y con un ambiente muy bueno.

Aquí he ido a parar al hostel White and Blue y desde el primer día el ambiente en el no podía ser mejor. Empezando por Said que trabaja aquí, Massimo un Italiano de Barcelona, Lauren de Bruselas que lleva aquí un mes, Ada de Alemania varios días, Steve de Canada otros tantos, Xing de China llegó el mismo días que yo, Hanoko de Etiopia, Ada de Alemania… y mientras pasan los días otros van y vienen pero siempre se mantiene el buen ambiente.

Los días pasan tranquilos entre estár tranquilo en el hostel con el ordenador y paseos por la medina y la playa. Algunos días vamos a comer o cenar a baretos locales por 25dh un plano de cuscus mejor que los que comí en Fez por 50dh, un plato de pescado variado frito por 15dh o sopa marroquí por 5dh.

Pero en un hostel una de las cosas más divertidas y que más unen a la gente es juntarse y preparar cena en común, en esta ocasión un mix chino-marroquí.

La playa ha resultado ser no apta para tomar el sol, hace mucho viento y frio, pero es muy buena para pasear y ver a los kitesurfers y los camellos que alquilan para paseos.

Dicen que en un pueblito pesquero a unos pocos kilometros Jimi Hendrix pasaba las horas fumando y eso lo tienen también como reclamos turístico para los paseos en camello, caballo o moto.

En mi último día paseo por la Medina y un vendedor me pregunta de donde soy, al responderle que España me pide que le escriba una carta para una familia de Barcelona y me invita a un Té y una agradable charla.

Al contrario que Fez, Esaouria es el ejemplo de gente más tranquila, buen ambiente y un lugar al que volvería. Pero cierto es que la gente con la que coincidí condiciona mi opinión.