Día 23 de Junio

Ya con todo visto en Haifa y disfrutado de su playa me voy a la siguiente ciudad playera y fiestera, Tel Aviv. También es la ciudad más de mente abierta y tolerante. Como llego en viernes y los viernes por la tarde a las 6pm empieza el Shabat (día en que dios descansó) salgo a comer y dar una vuelta por el mercado de Carmel, y en previsión de no morir de hambre si todo está cerrado compro unos botes de pasta instantánea. Por la tarde me uno a un chico y una chica que también están en el hostel y que van a la playa. Primer partido de voleyplaya del año.

A las 8 vuelvo al hostel porque hacen una «cena de Shabat» y quiero saber que tiene de especial. Aunque realmente es una especie de buffet con algún plato típico Israelí y no tiene nada de especial es interesante para socializar con otros del hostel. Santiago, un colombiano que está en mi habitación se une.

Al día siguiente salgo a recorrer la ciudad y la chica del voley, a la que llamaré Ebba porque esto lo escribo ya muy tarde y olvidé su nombre, me acompaña. Los barrios de Florentin y Shabazi que quedan cerca del hostel son los que más me gustan.

El mercado de Carmel tiene mucha vida todos los días salvo los Shabat que está todo cerrado, como hoy.

Tel Aviv es una ciudad moderna, con tiendas y restaurantes que cuidan mucho su decoración. Calles con encanto y multitud de grafitis. Hace calor, Ebba ya no puede caminar más y decidimos pasar por hostel a comer y cuando baje el calor terminar de ver el barrio viejo de Jaffa.

El barrio de Jaffa esta concurrido especialmente por árabes pero también es una zona de moda para cenar y tomar algo, especialmente la parte del puerto.

Como es mi última noche en Tel Aviv, por ahora, me apunto al pub crawl (salir de pub en grupo con un guía) que organiza el hostel a ver como es esa famosa noche de Tel Aviv. Santiago y Daniela se apuntan y aunque lo pasamos bien con el grupo tampoco me parece una locura 🙂

Después de toda la caminata Tel Aviv me parece una buena ciudad para estar un tiempo, me recuerda un poco a Valencia aunque no tan bonita, pero los barrios con vida, la playa en la ciudad, el clima y el buen ambiente que hay por todas partes. Como ahora sé que mi vuelo, el real, va a salir desde aquí por ser más económico que Amman volveré unos días más para terminar mi visita a Israel. Tel Aviv sería un buen lugar para estar un tiempo si tuviera precios más económicos pero si me quedará más tiempo me rompería el presupuesto o terminaría comiendo pasta con tomate en todas las comidas.