8 de Agosto de 2018

Para mi grata sorpresa coincidió que en el mismo momento que yo estaba en Capadokkia también lo estaban una pareja de argentinos que conocí en Marruecos, Juani y María, y fue una alegría volverlos a ver.

Después de la atracción principal que es subir a un globo en Capadokkia aún se pueden hacer más cosas, suficientes como para quedarse 2 o 3 días más tranquilamente y eso es lo que yo hice. De hecho hay bastante gente que viene y no sube al globo, simplemente con ver el espectáculo desde tierra que también es impresionante. Hay un mirador junto al pueblo con unas vistas espectaculares de los globos, algunos pasan tan cerca que los podrías tocar.

También me cambié a otro hostel que por 2 euros más tiene un desayuno muy bueno y además tiene piscina!

Además de los globos Capadokkia es famosa porque en esta región la gente vivía dentro de las montañas, escabando sus casas en esta roca volcánica que mantenía el interior fresco en verano y caliente en invierno.

Yo me apunté a hacer un tour guiado de 8 horas, red tour, que te llevaba a varios punto de interés, en las fotos y la historia muy impresionante como el monasterio de Selime, la ciudad bajo tierra de Derinkuyu o el valle de Ihlara, pero el poco tiempo que hay para verl cada cosa, lo «poco» que puedes ver de la ciudad y lo muy alejados que están unos de otros el tour se me hico muy pesado.

Aunque yo me podría haber ahorrado ese dinero para los que no tienen problema en verlo todo rápido puede ser un tour interesante, especialmentea por la historia de la ciudad bajo tierra.

Existen varias rutas para hacer algo de senderismo que te llevan por varios valles como son el valle rojo, el rosa, de las palomas, de las chimeneas, … Al hostel llegó una argentina que viajaba sola, Magali, que se unió a recorrer algunos de los valles cercanos. El primer día recorrimos el valle rojo y rosa. En el camino conocimos a un ruso que esta recorriendo el mundo trabajando en el camino usando la web workaway, como era mi intención cuando empecé a planear el viaje. Al principio es terreno bastante desértico y vas viendo casas en la roca, después por suerte ya empieza la vegetación y algo de sombra.

Otra ruta que me recomendaron Maria y Juani fue la del Pigeon valley, valle de las palomas. Una ruta sencilla y sin perdida que va por un valle hasta la ciudad de Uchiçar. Por el camino se ven varios agujeros escabados como casas para las palomas. Cuando te vas acercando a la ciudad empiezas a ver campos de frutas y flores y el enorme castillo al fondo. (*El castillo es enorme porque es una montaña de piedra!)

El castillo me pareció mucho más interesante por fuera porque por dentro no hay nada, únicamente unas cuevas vacías, y las vistas desde lo alto son buenas pero tampoco lejos de ser memorables.

Aprovechando mi último día antes de subir al siguiente bus visotamos el parque de goreme que es patrimonio de la Unesco y dimos una última  vuelta por el pueblo.